La desidia

Desidia: Negligencia, inercia. (del latín desidĭa)

Este verano comenzó con una imagen lamentable de en lo que se ha convertido nuestra Junta de Andalucía: un grupo de alcaldes de IU (para mí el partido político al que pertenezcan  o dejen de pertenecer es lo de menos) decidieron encerrarse en el Parlamento Andaluz  desesperados por el retraso en el pago de las ayudas a la formación a sus municipios por parte de la Junta de Andalucía, ya no sabían qué hacer… después de tantas promesas y tantos meses de incumplimiento. La respuesta de la Junta no fue la de una medida contundente para resolver el problema, sino la de “otra” medida contundente: mandar a la policía, para echarles del Parlamento.

Este ejemplo, nos sirve para ir obteniendo una visión global de lo que ocurre en nuestra comunidad autónoma, porque no se trataba de un caso aislado, ni mucho menos, no es únicamente un problema de gestión en una cuestión determinada, no se trata sólo de un problema en ciertas consejerías… No, es otra cosa, es la desidia de este gobierno. Y eso que no pretendo entrar aquí en los escándalos de corrupción de los EREs o las ayudas a la formación, que no son “moco de pavo”, y a los que no quiero ni puedo quitar importancia, pero de los que ya se ha escrito bastante. Quiero hablar de otra cosa, no menos grave.

La ratonera de un PTA sin Metro

Cuando la idea del Metro no era más que un boceto inicial o una bonita infografía que no tenía aún fechas, itinerario ni presupuesto;  ya era evidente la necesidad de que este sirviese para conectar adecuadamente los servicios, administraciones, empresas y residentes en la zona oeste de Málaga en dirección al eje del Guadalhorce y, muy especialmente, el PTA. Sin embargo, la torpeza y la tozudez de nuestros políticos se impusieron una vez más (y probablemente también otros intereses…), y ahora contemplamos sus consecuencias, en una situación insostenible, que costará tiempo solucionar.

Victoria rotunda del bipartito PPSOE gracias a la división de la izquierda

Es urgente que saquemos conclusiones de lo ocurrido en las elecciones andaluzas de este 22M. Para empezar, 80 de los 109 diputados (un 73%) pertenecen a la eterna coalición PPSOE (los mismos que pactaron el reparto de sillones hasta 2017 en la cámara de cuentas justo antes de las elecciones). Primera señal de que el bipartidismo, sigue muy fuerte en España. Y la primera  consecuencia de este reparto: nada cambia en Andalucía, sigue el paro, siguen los recortes, sigue la corrupción. Gobiernan los mismos, el sistema no está en peligro y se mantiene. En este contexto, una nueva fuerza, Ciudadanos  (bien “de derechas”, como ha demostrado  al  situarse junto al PP para mantener el Decreto 16/2012 que deniega la atención sanitaria a los inmigrantes) obtiene nueve parlamentarios.
Pero en lo que se refiere a la izquierda, el resultado de IU, desastroso, de 12 a 5 diputados, el peor de su historia. Pero también ha sido decepcionante el resultado de PODEMOS (15 diputados), a pesar de que entra con fuerza en el Parlamento Andaluz, queda muy lejos de algunas encuestas y de lo que se esperaba. Probablemente, hay más gente decepcionada con el resultado de PODEMOS, que ha votado a esta fuerza política con la esperanza de un cambio “inmediato”, que con el de IU (más esperable).

Elecciones Andaluzas: Una larguísima jornada de reflexión

Llegados a este punto de la campaña electoral únicamente tengo claras tres cosas:
1. Voy a ir a votar el 22M, HAY QUE IR A VOTAR EL 22-M
2. No pienso votar en blanco o nulo (eso siempre beneficia a los mismos al PPSOE) y quiero apoyar con mi voto un nuevo reparto de escaños, es el momento de poner patas arriba el parlamento andaluz.
3. No voy a votar a la coalición PPSOE y tampoco a un partido como “Ciudadanos” que ya está mostrando sus cartas con gestos como el de apoyar el decreto 16/2012, junto al PP  y seguir así negando el derecho a atención sanitaria a los inmigrantes.

Y a partir de aquí comienza el problema, comienzan mis dudas y, por lo que he visto en las últimas semanas, compartidas con mucha otra gente.
Me parece que Antonio Maillo es un buen candidato, y me parece también que Teresa Rodríguez es una estupenda candidata, y me parece que ambos podían haber encabezado ese cambio radical en Andalucía que muchos queremos  ¿Por qué no podían ir juntos en una candidatura? ¿Quién/es son los responsables de que eso no sea posible? Esa pregunta nos la seguimos haciendo muchos… Lamentablemente, escribo esto para compartir aquí mis interrogantes, porque sigo sin tener las respuestas.

La duquesa de Vallecas

La pasada semana nos deja dos imágenes difíciles de olvidar. Todo el mundo se deshace en elogios por el fallecimiento de la adinerada Duquesa de Alba (especialmente lamentable y representativo de la vomitiva  “marca España”,  la escena de personas desoladas besando estampitas de la duquesa de Alba) dueña de numerosos palacios, y mientras tanto, Carmen, una señor a de 85 años de edad, es desahuciada de su casa, por un préstamo impagado por su hijo.  Los medios de comunicación tampoco escatimaron piropos y alabanzas a los grandes “logros y hazañas” de la duquesa de Alba, la “gran revolucionaria, rompedora, felipista” (como si esto fuese un elogio). En cada comentario podía esperarse que, de un momento a otro, señalaran la fecha de su pronta beatificación.

Andalucía: otro curso escolar sin retirar el amianto de los colegios

Un año más la Junta de Andalucía hace oídos sordos a las reclamaciones de padres y madres, peticiones de la comunidad escolar y denuncias de asociaciones. En la ciudad de Málaga colegios con CEIP José Calderón en la barriada de Campanillas, continúan con cubiertas y tejados en los que el peligrosísimo (se trata de una material cancerígeno) amianto está presente. Lo más grave es que, en casos como el de este colegio de Campanillas, el material ha superado con creces su vida útil y presente un gravísimo deterioro con grandes agujeros que dejan escapar fibras de este material. Las peticiones realizadas han caído en saco roto una y otra vez, la Consejería de Educación se excusa diciendo que el material no ha superado su vida útil (la instalación de dichas cubiertas des es del año 1973!!!) a pesar de los enormes agujeros y el deterioro que presenta. Una vez más, los recortes en presupuesto se imponen por encima de todo, también en educación, poniendo en riesgo nuestra salud, la de cientos de niños y toda una comunidad educativa. Mal comienzo para inaugurar un curso, especialmente cuando se trata de algo que viene siendo denunciado desde el año 2012, (en el año 2009 ya se venía advirtiendo del grave deterioro del material).